5 atracciones que no puede perderse en Colonia
Capital de Renania del Norte-Westfalia, Colonia es una ciudad que sorprende al visitante por su irreverencia, casi latina. Esto, claro, además de atracciones icónicas como su catedral, que la Unesco ha declarado patrimonio mundial. No faltan, pues, motivos para conocer Colonia.
Estas son las 5 atracciones que no puede perderse de ningún modo.
El Museo Ludwig es el Museo de Arte Contemporáneo de Colonia. Está situado cerca de la catedral y posee un acervo de arte moderno muy interesante, con nombres consagrados (y no tanto), como Roy Lichtenstein, Pablo Picasso, Henri Matisse, René Magritte o Andy Warhol, motivos más que suficientes para incluirla en su lista de qué hacer en Colonia en una pequeña escapada. El pop art tiene un papel relevante en el museo, pero hay mucho más que Warhol para ver.
El Palacio Augustusburg es un magnífico ejemplo de los excesos de la arquitectura rococó en Europa. Situado en la pequeña ciudad de Brühl, a pocos kilómetros de Colonia, es seguramente uno de los momentos álgidos de cualquier viaje a la región.
Vale la pena llegar temprano para visitar el Palacio Augustusburg con menos gente. Las visitas están acompañadas obligatoriamente por un guía, de habla alemana, aunque podrá llevar con usted una audioguía en español, proporcionada gratuitamente por las simpáticas empleadas del palacio, construido por orden de Clemente Augusto de Baviera.
El agua de colonia debe su nombre precisamente a la ciudad alemana de Colonia. Entre los actuales productores, el más emblemático es la Casa Farina, cuya fragancia original, creada por el perfumista italiano Giovanni Maria Farina, se produce todavía hoy en día. Él fue el que creó y popularizó la fragancia.
Visitar el Museo del Perfume de Colonia una forma tranquila y agradable de enterarse de una parte importante de la historia de la ciudad. La visita, también siempre acompañada por un guía, dura alrededor de una hora. A pesar de que no es una experiencia absolutamente imprescindible cuando el tiempo escasea, bien vale la pena.
La catedral de Colonia es una de las iglesias más altas del mundo y ha sido declarada patrimonio mundial por la Unesco. Consagrada a San Pedro y Santa María, la catedral es el monumento más visitado de Alemania y un edificio imprescindible de la ciudad de Colonia. La catedral es realmente majestuosa y espectacular, y domina el paisaje urbano de la capital de Renania del Norte-Westfalia. Desde donde quiera que mire, ella allí estará, imponente.
Una vez dentro, observe los vitrales y las tallas de madera del coro. La entrada es gratuita, pero vaya temprano para intentar evitar a la multitud de turistas.